De esta guisa, a modo de adorno navideño trasnochado. Bebiendo mistela en una copa de cáliz para pasar el frío y Mussolina en mano. Así y mucho mejor fue el pasado sábado en Cervera, auspiciado por la gente de RebelArt (que siempre se portan conmigo mucho mejor de lo que me merezco).
Gracias, gracias, gracias.
Gracias.