jueves, 3 de agosto de 2017

EL JUANQUI TIENE COPAS EP: melodías fresquitas para un verano que compartir!




RIOT ES VERANO. Riot es agua fresquita, gente guapa disfrutando del sol de las islas, es esa paellita rica en la costa CON TU GENTE, claro que sí, porque sois PRIMERA LÍNEA. Calité, chapó, nada que decir al respecto de vuestra despampanante genética.

RIOT ES MUSIQUETA GUAPA. SIEMPRE ELÉCTRICO, SIEMPRE CON LAS VÉRTEBRAS EN ENTREDICHO. Por eso, y porque me parece francamente fabuloso que, por alguna razón que no logro dilucidar, sigáis vivos y sin gente que amenace vuestra vida de forma regular.  

Por eso hoy os traigo un regalo muy especial, en el que llevo trabajando MUCHO TIEMPO. Tras emplearme en ello A CONCIENCIA, he decidido que ya está listo. Se llama "El Juanqui Tiene copas", y es CONCEPTUAL.

Para quien no lo sepa, cualquier obra que sea conceptual es por lo general mejor y más interesante que las obras que no lo son. Porque, cuando una pieza de arte es efectivamente conceptual, es como un abanico. Un abanico grande y precioso, de mil colores, abierto como la boca de un pescado sobre el hielo picado. Las obras conceptuales tienen las tetas enormes. Y dinero, por lo que siempre corren gozosamente con la cuenta. Cualquier obra conceptual, a diferencia de las demás, puede esperarte indefinidamente en una esquina, aguantándose los meados y sin decir ni mu: con un bofetón se siente recompensada, no lo dudes. Cabe dentro de una maleta de viaje estándar y también sirve como luz de emergencia (como casi todo, justo es decirlo, si se le prende fuego adecuadamente: pero no nos pongamos a desmerecer tan pronto, que es veranito y El Estado de Cosas está que se sale).

Os cuento un poco de qué va "El Juanqui Tiene Copas": a través de las cuatro canciones que se incluyen en el presente EP, se cuenta la historia de un grupo de personas que se conocen. Entre sí, quiero decir: no es que sean ni familiares ni amigos de la hostia, pero como mínimo se saben los nombres de los demás. Vale, pues uno de ellos es el Juanqui. El Juanqui (que es un personaje de ficción que me he inventado yo) es, por así decirlo, un hombre "que se viste por los pies". Trabajador, honrado y sin diagnósticos médicos comprometidos en ciernes, el Juanqui tiene unas copas. Las tiene, sin más, por ahí a la vista. Cuando haces algo conceptual, es importante dejar cosas a la imaginación del otro. También es importante. Hay cosas que son así, importantes, y hay que fijarse mucho para poner los puntos sobre las íes.

Vale, sigo: el Juanqui, que tiene un nombre de mierda y unas copas, está con esa gente que se conoce entre sí, ¿vale? Bien, pues en ese momento (que no se sabe bien qué pasa, es un poco misterio, medio que no se dice, para crear más interesantismo y dejar que las imaginaciones vuelen libres) pasa "una cosa" (que yo sé qué es, pero no lo voy a decir porque tenéis que descubrirlo vosotros) que hace que toda esa gente que se conoce entre sí pero no demasiado empiecen, así a bote pronto, a hacer "otra cosa" (ya lo veréis, se va descubriendo poco a poco). Las copas están por ahí, ¿vale? Están y la gente PODRÍA QUERERLAS. Pero... ¿de verdad las quiere? Las copas en cuestión, ¿están llenas? ¿De qué? Misterio. Luego lo digo, no os preocupéis.

Tenemos Juanqui, copas, gente que se conoce entre sí a un nivel superficial... Con todo esto, las canciones van sonando, alegremente todas y cada una de ellas. En la letras doy pistas, guiño-guiño. Y entonces, con todo ese super-follón ahí en medio, aparece... Aaaaaaaah. Misterio, otra vez. ¿Será un gitano armado con un vidrio afilado untado en excrementos y sin nada que perder? ¿O será un grupo de feminicidas deliciosamente bronceados y de alturas chocantes? ¿Será algo que se mueve poco y está dentro de una enorme bolsa de piel curtida? ¿Quizás una opinión minoritaria y torpemente expuesta? Qué nervios. 

Bueno, la cosa es que te he denunciado. Me he ocupado, y creo que lo sabes. Van a encontrarte. Cuando estaba denunciándote, sentía como si mi imaginación fuera un enorme rasca-y-gana: no recuerdo la mayoría de detalles, pero sé —y así lo sentí— que lo visualicé todo. Era casi como si fuera verdad.